El Centro Tecnológico Agropecuario del Paraguay (Cetapar), inicialmente fue un campo de capacitación para inmigrantes japoneses, creado en 1962 en Yguazú y en Alto Paraná. En 1963 ambos establecimientos se convierten en campos experimentales y a partir del 72, se conoce con el nombre de Centro Tecnológico Agropecuario de Yguazú (sede central) y Alto Paraná (sucursal). Hasta el año 2010, el Centro estuvo bajo administración directa de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA).
En conversación con el ingeniero Edgar Figueredo, director General de Cepatar, explicó a 5Días, que luego el Centro fue transferido a la Central Cooperativa Nikkei y actualmente es administrado por una organización denominada “Fundación Nikkei Cetapar”, siendo las cooperativas nikkeis del Paraguay, Federación de Cooperativas de Producción (Fecoprod) y la Central Nacional de Cooperativas (Unicoop), miembros del consejo de administración de esta Fundación.
¿Cómo trabaja el Centro en la actualidad con relación a las investigaciones?, y ¿qué papel cumple?
Cetapar es un centro de innovación, desarrollo y transferencia de conocimiento, que hoy converge como uno de los actores clave para el éxito de la producción agropecuaria del país. Es un sitio que está hace 60 años en Paraguay, ofreciendo servicios al campo y cuenta con uno de los laboratorios más complejos que ofrece sus capacidades al sector agro. Estamos muy contentos, porque hemos pasado por un proceso bastante largo para estar hoy vinculados a laboratorios internacionales.
200
Hectáreas posee Cetapar actualmente.