Japón: Deming vs Porter | Columnas | 5Días

Japón fue el epicentro del enfrentamiento entre dos de las ideas más importantes del management, que fueron esgrimidas, aunque en épocas distintas por dos norteamericanos: Edward Deming y Michael Porter.

Es la historia de la imposición de la estrategia sobre la calidad total, que tiene como telón de fondo el ascenso y declive del Japón.

Cuenta la historia, que, durante la segunda guerra mundial, los técnicos japoneses habían hecho un estudio del potencial productivo del complejo industrial de los Estados Unidos. Estos documentos, que fueron desclasificados en 1990, revelan que los japoneses quedaron asombrados porque los norteamericanos fueron capaces de quintuplicar el material bélico producido, en un tercio del tiempo estimado por los nipones. ¿Cuál era la magia detrás de la impresionante capacidad productiva bélica de los Estados Unidos? La respuesta se debía a la aplicación de una nueva metodología de gestión: el sistema de calidad total. ¿Existía algún artífice detrás de ese milagro? Pues, sí. Se trataba de Edward Deming, doctor en estadísticas.

Esta información, que en su momento era secreta, sería valiosísima para las ambiciones productivas del Sol Naciente, que salía de la guerra destrozado, y también quebrado en su trayecto de industrialización, pero que seguía con el mismo afán de conquistar el mundo, pero ya no en el campo de batalla, sino en el mercado global. En tanto, las empresas norteamericanas que habían emprendido programas de control total durante la guerra perdieron el entusiasmo de este método productivo y se volcaron a producir en masa con la sola intención de saciar la demanda global interminable de bienes durables.