Con más de tres décadas de recorrido en el sector financiero, Germán Rojas Irigoyen transita un nuevo reto tras su nombramiento como presidente del directorio de Banco Basa.

Su misión fundamental será acompañar el proceso de transformación y renovación en el que está inmersa la organización.

En la foto: Germán Rojas, presidente de Banco Basa.

Con el objetivo de crecer e innovar constantemente en la experiencia de los clientes, Banco Basa presentó a Germán Rojas como nuevo presidente.

Germán Rojas se ha desempeñado en diversos roles dentro del sector público y privado a lo largo de su trayectoria. Con una visión centrada en las personas -tanto clientes como colaboradores-, tiene la misión clara de impulsar el crecimiento estratégico de la institución financiera.

“Basa es un banco que busca estar cerca de sus clientes compartiendo sus objetivos. El gran desafío es generar la prosperidad de nuestros clientes, presentando las mejores soluciones para dar respuesta a sus necesidades”, comentó Germán Rojas.

Por su parte, Claudio Laterza, gerente general de Basa, expresó que para la institución es un privilegio contar con Germán Rojas, no solo por su trayectoria profesional, sino también por sus valores y su calidad como persona. “Estamos seguros que, con su liderazgo y conocimientos podremos avanzar en el camino de transformación que iniciamos”.

En una entrevista reciente, Germán Rojas Irigoyen habló sobre su visión para el sector financiero paraguayo y los desafíos en materia económica que enfrenta el país.

En ese sentido, el gran reto que tiene el directivo al frente de Banco Basa -en sus propias palabras-, es lograr que las personas y empresas que operan con la institución encuentren la mejor opción para resolver y satisfacer sus necesidades en tiempo oportuno.

“Creo que la eficiencia en los tiempos de respuesta es sumamente importante; yo prefiero dar un «no» inmediato, que un «sí» tardío o cuando ya no sirve. En un contexto amplio, este pensamiento es aplicable a la resolución de problemas; no encararlos a tiempo implica mucho más desgaste; y por regla general, la solución termina siendo más compleja y de mayor costo. Patear un problema hacia delante no es solucionarlo”, expresó.

UN RECORRIDO POR VARIOS SECTORES

Los momentos más destacados en la carrera de Germán Rojas, fueron aquellos en los que continuó la línea de otros valiosos actores en el propósito de crear, sostener y consolidar el desarrollo de Paraguay.

En su tránsito por el Banco Nacional de Fomento (2003 – 2007), lideró un equipo que logró una reversión de la situación en la que se encontraba la institución.

En esta tarea, Paraguay tuvo la oportunidad de aplicar sus propios criterios de recuperación al punto que la reforma de la banca pública -de ese entonces-, que formaba parte del acuerdo Stand By suscrito con el Fondo Monetario Internacional (FMI), logró ser modificado a través de la aplicación de una solución enteramente local, que sustituyó al plan original ahorrando grandes recursos al país.  

“La medicina tradicional paraguaya es efectiva hasta en este tipo de enfermedades”, mencionó Rojas.

Así mismo, en su cargo como presidente del Banco Central del Paraguay, la institución logró la sostenida reducción de la inflación y el fortalecimiento del sistema financiero, en la implementación del sistema de pagos -que hoy es masivo-, en regulaciones adecuadas al contexto económico del momento; y a la expansión del financiamiento a sectores productivos.

En este periodo, el BCP implementó un esquema basado en meritocracia para incorporación de talentos que hoy ocupan cargos de relevancia tanto en la institución como en otras del sector público y privado.

Como ministro de Hacienda y con el apoyo de actores relevantes de la economía, del Congreso y en base a propuestas de los equipos del ministerio, implementó políticas que ayudaron a promover el crecimiento económico y la inversión extranjera en Paraguay, mediante la incorporación de aditivos que consolidaron los cimientos de los fundamentos de la economía como por ejemplo, la ley de responsabilidad fiscal, y la puesta en marcha de políticas para el fortalecimiento de capital humano, entre otros.

“En cuanto a lo que nos haya tocado realizar y si pudiera aplicar alguna evaluación, elijo la que cada uno hace de sí mismo en cuanto a cómo se encontraba el lugar al comenzar su labor y como lo deja al salir. Son esos momentos donde podemos reflexionar sobre el impacto real que dejamos en la vida de otras personas, a través del trabajo y servicio a la ciudadanía, sobre todo, a aquellos que más necesitan y que tienen menos oportunidades”, enfatizó el directivo bancario.

A pesar de todas sus contribuciones, el actual presidente de Basa -al igual que todos- tuvo que enfrentar varios desafíos a lo largo de su trayecto profesional.

“Para enfrentar las dificultades, sirvió mucho identificarme con personas que tienen la misma vocación, ideas, valores y coraje para enfrentar grandes desafíos. Así como a los mayores detractores; y a estos con más detenimiento, porque siempre tienen algo valioso que decir”, aseguró.

En ese sentido, Germán Rojas considera que la base del éxito de un profesional es el trabajo en equipo y la colaboración. También cree importante, contar con una visión clara de los objetivos y capacidad de tomar decisiones difíciles; así como entender de la mejor manera el fin que se persigue con cada acción que se encara.

“Es importante entender que se entra y se sale caminando de cualquier posición o cargo que toque ocupar y que los resultados nunca son logros individuales, sino en función al trabajo de muchas personas. Ningún logro mío fue resultado de mi trabajo individual y por ello, no puedo atribuirme ningún crédito; estos son -en un 99%- del equipo que lo hizo”, enfatizó.

“De la misma manera, la única condecoración válida es la que uno mismo se da cuando termina la tarea. El juicio que uno hace de la misma, tiene como recompensa el poder dormir en paz”.

A la opinión del directivo bancario, es necesario seguir impulsando espacios y generando oportunidades para las próximas generaciones que apliquen nuevos conocimientos. “Dentro de toda esta dinámica, hay mucho manejo del «yo». Muchos proyectos grandes fracasan cuando en la cabeza de los líderes no existe buena gestión de los egos, comenzando por el mayor desafío que consiste en reconocer las propias limitaciones”.

En ese aspecto, insistió que el modelo de liderazgo ideal en una organización, es aquel que se realiza de forma compartida y basada en la confianza mutua; lo que implica aceptar consenso aun estando en desacuerdo. Además de tomar decisiones difíciles ante la incertidumbre y por sobre todo; avalar las mejores ideas sin importar de quien venga.

“Siempre es importante construir confianza, trabajar en equipo y no temer al fracaso o al error. Todos tenemos derecho a equivocarnos, no así a repetir el mismo error”, explicó.

PERSPECTIVAS ECONÓMICAS

Respecto a la economía del país, Germán Rojas consideró que Paraguay está en una buena posición para seguir creciendo, aunque es fundamental continuar trabajando para consolidar los logros alcanzados hasta el momento.

Según su evaluación sobre del desempeño económico de los últimos años, Paraguay ha logrado construir una buena base para los cimientos de su economía. La estabilidad fiscal es un bien público que debe preservarse, lo que equivale a decir que, el buen cimiento está a la vista.

“Lo que sucede con la economía paraguaya no es muy diferente a lo que sucede con la economía personal; no podemos ofrecer y prometer lo que no tenemos o no podemos cumplir. Todos somos conscientes que las expectativas son infinitas, pero los recursos limitados. Sabemos que el dinero no es del Estado, sino de cada contribuyente que merece ver el resultado de su contribución en bienes y servicios acordes a su esfuerzo en cumplir con sus obligaciones”, resaltó

En ese mismo contexto, sostuvo que Paraguay debe mantener los buenos indicadores macroeconómicos para llegar al grado de inversión que hace tiempo merece.

Lo que implica lograr el grado de inversión tiene dos caras como cualquier moneda; una que implica el acceso a fuentes de financiamiento de mejores tasas, mayores plazos y con mejor calidad de inversores.

La otra, el desafío de sostener y consolidar este status en el tiempo; y esto no solo desde la perspectiva del financiamiento del sector público sino también del sector privado, fundamentalmente a largo plazo.

También aseguró que, durante el proceso para alcanzar estas metas, habrá desafíos y amenazas, como las climáticas -por ejemplo-, a las que se verá expuesta la economía local y regional, pero será vital tomar consciencia de ellas y continuar con el uso responsable de los recursos naturales.

“Paraguay es una excepción a lo que sucede en la región en materia económica y de crecimiento, pero pareciera que somos los únicos que no nos damos cuenta de ello. Somos víctimas de una baja autoestima que no nos permite ver lo que sucede afuera y valorar los aspectos positivos que nos destacan”.

Por esta razón, el presidente de Basa reafirmó la trascendencia de iniciativas como las Becas Carlos Antonio López (Becal), que permite a muchos paraguayos no solo desarrollar su potencial profesional, sino también romper las barreras a las que se refería anteriormente.

“Aquel que ve el mar, ve el mundo y quienes participaron y se vieron beneficiados con estas becas, pueden dar testimonio de tener las mismas o mejores habilidades que cualquier otra persona con la que hayan interactuado durante su formación en el exterior. Entonces, no solo los nuevos líderes que surgen de estas iniciativas se valoran a sí mismos, sino que también hacen conocer al país a través de sus talentos. Cada paraguayo que obtiene apoyo se convierte en su propio padrino por acceder por mérito propio a los mejores centros de conocimiento del mundo”, acentuó Rojas. 

A la par, resaltó que es esencial desarrollar capacidades que permitan profundizar los cambios en la matriz económica de Paraguay, como la creciente diversificación de las actividades que se observan en los últimos años y que vienen de la mano -auspiciosamente-, de la nueva generación de líderes paraguayos.

Paraguay está recibiendo inversión extranjera que propicia una mejor infraestructura y mejores instalaciones, que no será suficiente para el crecimiento del país si esta coyuntura no viene acompañada de oportunidades para los ciudadanos en términos de preparación, formación y mercado laboral.

En ese aspecto, manifestó que, “Paraguay necesita en paralelo una fuerte inversión en educación, identificación de talentos y por ende, de oportunidades. Y no me refiero solo a las carreras universitarias tradicionales, sino al enorme potencial de crecimiento en actividades de mandos medios, conocimiento de manejo de recursos naturales, nuevas formas de generar prosperidad que van cambiando y acentuando con la aparición de inteligencia artificial, robótica y otras herramientas que hacen a esta nueva economía y obliga a una mayor competencia y preparación para el nuevo escenario. Más que nunca, la creatividad y la iniciativa propia marcarán el rumbo para las nuevas generaciones; y no cabe duda que, el paraguayo destaca por su creatividad”.

Germán Rojas Irigoyen explicó que, si estas acciones no se potencian, se corre el riesgo que otros ocupen los espacios que deben estar destinados a los mejores talentos locales. 

“Paraguay debe realizar una revisión profunda de su sistema de talento humano para replicar modelos exitosos, sin perder nuestra identidad. Es fundamental insistir en fomentar la lectura y la curiosidad, así como la sed de conocimiento”, aseguró.

SISTEMA FINANCIERO

En lo referente al sector financiero paraguayo, Germán Rojas Irigoyen cree que todavía existe un espacio adicional de crecimiento. Sin embargo, resaltan algunos desafíos que deben abordarse indefectiblemente, como la necesidad de mejorar la educación e inclusión financiera.

A su visión, el sistema financiero en Paraguay es -probablemente-, el más regulado en las actividades económicas del país. “Este es un buen ejemplo de lo que expresaba anteriormente, en el sentido de las lecciones aprendidas de las crisis financieras de los años 90 y la aplicación de medidas de fortalecimiento y consolidación del sistema”, expresó.

El marco normativo que vino desarrollándose a partir de estas experiencias, generó una dinámica de constante profesionalización del sector financiero, acelerando a partir del 2012, cuando Paraguay comenzó a captar la atención de grandes mercados internacionales.  

“En función a una buena concientización y conocimientos actualizados, podremos lograr que la tarea llegue al objetivo que perseguimos, que es la satisfacción de aquellos a los que servimos: los clientes”, manifestó el presidente de Basa.  

En lo que respecta a la digitalización en la industria opinó que, aun contando con toda la tecnología disponible y procesos digitalizados, si no se acompaña este avance con el lado humano, puede ser difícil consolidar el éxito de una organización en el tiempo y permanecer vigentes en el futuro.

“Ninguna herramienta logra su objetivo si no trae consigo un elemento que la tecnología no posee; la empatía. También considero importante que el sector financiero fortalezca su comunicación con quienes interactúa, es clave dar a entender en qué consiste la actividad de intermediación financiera, comenzando por el concepto básico que un banco o financiera es un lugar donde una persona se acerca para proteger su medio de subsistencia, que son los recursos que genera y ahorra”, resaltó.

Continuó explicando que, las instituciones financieras buscan generar recompensas a la confianza de las personas a través de los intereses que el depositante recibe. “Ahora bien, estos intereses se generan a su vez, en la selección que el banco realiza de la persona a quien los recursos de este ahorrista irán a ser prestados y los intereses que éste devuelva en tiempo y forma por los recursos recibidos”, expuso.

Para finalizar, Germán Rojas consideró indispensable que tanto la industria como el gobierno, potencie mayores acciones que permitan a las personas entender y aplicar el buen uso del dinero, la administración de las finanzas personales y la generación de deudas responsables.

Como anécdota comentó que, “En una ocasión, una persona se acercó a solicitarme un préstamo para comprar un televisor, pero no calculó que además necesitaría un soporte, electricidad y otros gastos extras. Una deuda con sentido para esta persona sería -por ejemplo- invertir en un carrito de comidas para generar ingresos adicionales a su actividad principal y con lo generado en dicha actividad extra, comprar el televisor y pagar sus costos asociados. Es necesario que enseñemos a priorizar lo que es urgente, lo necesario y lo posible”, finalizó.

BASA: UN BANCO QUE CRECE ORIENTADO A SUS CLIENTES

Basa es una institución que ha presentado un crecimiento sostenido en los últimos años. Presentando productos innovadores que marcaron pautas y tendencias en el sector.

Si bien la institución sigue creciendo tanto en sus bancas minorista como mayorista, la misma hace énfasis en la importancia de conservar su cercanía con los clientes.

“La empatía con el cliente es el valor que nos identifica y que buscamos conservar y potenciar. Nuestra meta es que cada persona que entre al banco, sienta que sus necesidades son comprendidas y satisfechas con soluciones acordes y convenientes, de forma rápida y sencilla”, comentó Claudio Laterza, gerente general de Banco Basa.

“Queremos crecer sin perder nuestro encanto de banco cercano; un lugar donde te sentís como en casa, donde se te conoce por tu nombre”, insistió el ejecutivo.

Con miras a hacer realidad esta visión, la institución se encuentra recorriendo un proceso de transformación cultural. “Sin lugar a dudas, la piedra fundamental de este modelo de negocio son las personas y es por eso que, nos encontramos inmersos en un proceso de cambio cultural que pone a los clientes y colaboradores, en el centro”, resaltó Claudio Laterza.

Otro aspecto importante en la construcción de esta visión, son sus instalaciones. “Queremos un lugar donde, nuestros clientes y colaboradores, se hallen. Es por eso que, decidimos invertir en mejorar nuestras instalaciones, renovando nuestra casa matriz, sucursales y construyendo nuevas oficinas. Queremos que nuestros colaboradores tengan un espacio de trabajo más inspirador y por supuesto, que nuestros clientes tengan una excelente experiencia cuando nos visitan”, mencionó el ejecutivo bancario.

RSE Y SOSTENIBILIDAD

Uno de los ejes de RSE y sostenibilidad de Basa es la búsqueda de la equidad de género a través de mayores oportunidades para las mujeres.

“Con nuestro programa mujer buscamos apoyar a emprendedoras no solamente a través de créditos, sino con acompañamiento integral a su negocio. Emprender es complejo y más aún, proyectar un negocio financieramente. Por esto, acompañamos a las emprendedoras desde el inicio del proceso de solicitud de un crédito y las asesoramos en todo el camino para que la decisión que tomen sea la indicada para su negocio”, expuso Laterza.

Así mismo concluyó mencionando que, siente mucho orgullo porque la entidad ha logrado colaborar con cientos mujeres.  “Es un programa que trabajamos en conjunto con la AFD y su fondo de garantías Fogamu. El trabajo colaborativo sin dudas, marca la diferencia”, finalizó Claudio Laterza.

PERFIL – GERMÁN HUGO ROJAS IRIGOYEN

Actualmente presidente del directorio de Banco Basa.

Germán Rojas nació en la ciudad de Asunción el 24 de julio de 1957, realizó sus estudios secundarios en el colegio Goethe Schule. En su etapa universitaria se licenció en administración de empresas y contabilidad, donde obtuvo una mención de honor por la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción.

Realizó un posgrado en administración de pequeñas y medianas empresas en los años 1977 – 1983. Además de cursos de economía de países en desarrollo en la Universidad Erlangen Nurnberg (Alemania) 1991 – 1992.

Se desempeñó como gerente financiero y comercial del Banco del Paraná SA (1997 – 2002). Fue además, presidente del Banco Nacional de Fomento (2003 – 2007).

También lideró el Banco Central del Paraguay como presidente (2007 – 2008). Desde el 2008 se sumó al Sudameris Bank como vicepresidente y asesor del CEO del Grupo Abbeyfield, posición que ocupó hasta el año 2013.

En ese mismo año, fue nombrado ministro de Hacienda y ocupó el cargo hasta el año 2014. Posteriormente, en enero de 2016 fue nombrado embajador de Paraguay ante el gobierno de los Estados Unidos de América.

Siguiendo con su hoja de vida, Rojas fue designado director ejecutivo por Paraguay en el Banco Interamericano de Desarrollo – BID (2019 – 2023).

También fue director de administración de proyectos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y docente. Parte de su actividad también la ha volcado a gremios como la Asociación Paraguaya de la Calidad, el Club de Ejecutivos y la Cámara de Anunciantes de Paraguay.

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