La oficina de dicha institución, liderada por Hans Kluge asegura que las pruebas de covid-19 son necesarios en algunos casos para ir dando lugar al regreso a las clases presenciales.

Dicha entidad emitió un comunicado en el que, con respaldo de la UNICEF y la UNESCO resalta el nefasto efecto en la educación que generó la modalidad a distancia.

La nota en sí refiere entre sus puntos más sobresalientes que “no podemos permitir que la pandemia prive a los niños de la educación y su desarrollo”.

Consideran que la virtualidad sólo acarrea distorsiones y no contribuye al bienestar social y mental de los niños y los jóvenes.

Entre otras cosas, la OMS asegura que en el último de los casos se debe recurrir al cierre de las instituciones educativas, siempre que haya una explosión de casos que no puedan ser controlados con medidas básicas de prevención.

Kluge admitió asimismo que se solicitó a los gobiernos de los 53 territorios que conforman la región europea de la OMS que hagan los esfuerzos necesarios para que los alumnos no pierdan sus vínculos con sus instituciones.