La petición la formuló el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, quien señaló en un comunicado que „no hay ninguna justificación razonable para que Taiwán siga siendo excluido de este foro“ e instó a que se le extienda una „invitación inmediata“.
Blinken defendió que la Asamblea „es el órgano decisorio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y establece la agenda para fortalecer la cooperación internacional, para poner fin a la pandemia de la covid-19 y avanzar en la salud mundial y la seguridad sanitaria mundial“.
„Taiwán ofrece valiosas contribuciones y lecciones aprendidas de su enfoque de estos temas, y el liderazgo de la OMS y de todas las naciones responsables deben reconocer que excluir los intereses de 24 millones de personas en la AMS sólo sirve para poner en peligro, no para promover, nuestros objetivos compartidos de salud mundial“, afirmó el jefe de la diplomacia estadounidense.
Blinken calificó a Taiwán como un „socio confiable, una democracia vibrante“ y advirtió que su exclusión del cónclave, que este año se celebrará de forma virtual debido a la pandemia y no en Ginebra (Suiza), que es su sede tradicional, „sería perjudicial“ para los esfuerzos internacionales por controlar la pandemia y prevenir futuras crisis de salud.