Para las 13:00 de este miércoles estaba fijada la sesión extraordinaria de la Cámara Baja que tenía como único punto del orden del día la interpelación a Julio Fernández, titular de la Dirección Nacional de Aduanas.

Solo 37 diputados se encontraban presentes en la sala de sesiones de los 41 que se requerían para arrancar, motivo por el cual se debió suspender la convocatoria.

Fernández acudió de forma presencial al Congreso para ser interpelado, aunque dijo estar sorprendido por el hecho de que no se haya logrado el número necesario de legisladores.

“Creemos que gozamos de la confianza del Poder Ejecutivo y por eso seguimos”, expresó a los medios de comunicación.

Fernández sostuvo que “quería responder con solvencia” a las preguntas que le iban a ser formuladas durante la interpelación. Asimismo, descartó que debido a un acuerdo político se haya dejado sin quórum la sesión extraordinaria.

En la ocasión, aseguró que “no era una persona de conversación permanente” con el senador Martín Arévalo, a quien había denunciado por tráfico de influencias.