Lo hizo de nuevo. El diario Abc Color en su edición del martes 29, publicó como principal título de portada que la enviada de Joe Biden, la subsecretaría de Estado norteamericana Victoria Nuland, lanzó una “dura advertencia de EEUU, a los corruptos y lavadores” y avisó a Paraguay que su país posee “herramientas fuertes” y no tiene miedo para usarlas. Una vez más el diario apunta a los políticos “corruptos y lavadores”, sin tener en cuenta que uno de los casos que precisamente son considerados emblemáticos para la justicia del país del Norte, tiene a la entidad bancaria de su grupo empresarial en la mira.
Llama la atención la insistencia que realiza este medio de comunicación sobre el tema, sobre todo atendiendo que el banco Altas, se encuentra precisamente en la órbita de las investigaciones relacionadas al escándalo del FIFA Gate en la Corte de Brooklyn (NY).
En efecto, en el programa La Caja Negra habíamos revelado el resultado de una auditoría de carácter confidencial y documentos que demostraban el modus operandi del banco Atlas, perteneciente al Grupo empresarial de la familia Zuccolillo, para lavar parte de los US$ 200 millones desviados por Nicolas Leoz, expresidente de la Conmebol. De acuerdo con los informes, pese a que existía un pedido de extradición y un proceso penal abierto en su contra en la mencionada Corte de EEUU, el banco Atlas recibió del exdirigente deportivo Nicolás Leoz, más de US$ 6 millones en fideicomiso para blindar el dinero y asegurarse que no sean objeto de embargo. Asimismo, Atlas enfrenta una denuncia penal por presunto lavado de dinero y se expone además a una fuerte multa o suspensión temporal de hasta 180 días.
En el transcurso de las averiguaciones sobre el caso, fueron determinadas por lo menos 10 faltas por las cuales los directivos del banco Atlas debían ser investigados tanto por el BCP como por el Ministerio Público.
Entre estas se halló que el banco Atlas negoció dos contratos de fideicomiso con Nicolás Leoz. Ambos fueron celebrados en febrero de 2016, apenas un mes y 4 días después del allanamiento a la Conmebol, en el marco del difundido escándalo “FifaGate” y de la prisión domiciliaria dictada en contra de Leoz.
Hicieron caso omiso a las alertas
Asimismo, el banco Atlas hizo caso omiso a las señales de alerta sobre Leoz, pedido de extradición y proceso penal abierto en su contra, y autorizó fideicomisos por más de G. 40 mil millones. Los hechos, públicos y notorios, apuntaban a Leoz como parte de una organización mafiosa dedicada al fraude y blanqueo de dinero.
Las operaciones autorizadas por Atlas permitían el blindaje del dinero de Leoz, convirtiéndose el fondo en un patrimonio autónomo, exceptuado de posibles embargos y administrado por el banco a favor de Leoz y sus hijas con la finalidad, expresamente pactada, de cubrir gastos de salud y de procesos judiciales.
En otra parte se indica que el banco Atlas no aplicó el procedimiento de debida diligencia estipulado en la Ley Nº 6.497 que previene el lavado de dinero y obliga a los bancos a identificar al cliente, elaborar un perfil de este que permita determinar si es un cliente de “riesgo alto”; verificar la licitud de sus fondos y monitorear sus transacciones.
De igual manera, una auditoria privada ordenada por la Conmebol sobre las operaciones comerciales entre Atlas y Leoz reveló que no consta la emisión por parte del banco Atlas de un reporte de operación sospechosa (ROS) sobre los fideicomisos.
Según este reporte, el banco Atlas autorizó las operaciones de fideicomiso con documentos y recibos fraguados y sin aval suficiente. Además, documentos expuestos por La Caja Negra demuestran que el banco Atlas autorizó las operaciones con documentos presuntamente apócrifos.
Familia Leoz dejó en evidencia irregularidad
Otro dato significativo en esta historia tiene que ver con la devolución del dinero por parte de la familia Leoz. En efecto, en noviembre de 2020, las hijas de Leoz pidieron al banco Atlas ceder los derechos económicos de un fideicomiso y transferir a la Conmebol la suma de G. 8.881 millones. Con esto, la propia familia de Leoz dejó en evidencia que la operación con el Banco Atlas fue turbia.
Cabe recordar además que el banco Atlas negó información a la justicia norteamericana sobre las operaciones comerciales con Leoz alegando “secreto bancario”.
Asimismo, la investigación salpica a la Inmobiliaria del Este (IDESA), también perteneciente al Grupo AZ de los Zuccolillo y se la considera pieza clave en el esquema de lavado con dinero sucio de Leoz. IDESA administra varias propiedades de Leoz y deposita los rendimientos en el banco Atlas. La fiscalía de Nueva York no pudo acceder a información relevante sobre estas operaciones ya que la empresa de los Zuccolillo nunca respondió al requerimiento de la justicia.
Los directivos del banco Atlas enfrentan una denuncia penal por presunto lavado de dinero, por lo que el banco se expone a una fuerte multa o a una suspensión temporal de hasta 180 días.