Todos los productos derivados del petróleo que se distribuyen en el mercado paraguayo son de importación, uno de ellos es el Gas Licuado de Petróleo (GLP). Tiene diferentes usos, como el doméstico, para cocinar y calefacción; para transporte, como combustible de vehículo y para las industrias, también como combustible para distintos procesos.
El Observatorio del Mercado de los Combustibles, un portal de la Dirección General de Combustibles, del Ministerio de Industria y Comercio, creado para dar información del movimiento de los carburantes en el país, muestra que en el año 2023 se importaron 77.405.740 kilogramos de GLP al Paraguay, 5.204.590 kg más que en 2022.
De este total, 20.536.440 kg llegaron desde Bolivia, mientras que el restante 56.869.300 kg se importó directamente desde Argentina, el principal proveedor en este rubro. Estas cifras representan un 27% desde Bolivia y un 73% desde Argentina. En el 2022, el caso fue muy contrario, cuando el país del Altiplano exportó a Paraguay el 79% de lo que se hizo ese año. Esto se revirtió este año por la caída en su producción debido a que se agotan sus reservas.
Paraguay optaba mayoritariamente por la importación desde ese país por una mejor relación entre calidad y precio, sin embargo, desde finales de 2023 el Gobierno nacional evalúa abrir el mercado a otros oferentes internacionales para evitar la dependencia extrema de Argentina.
73%
del total se importó desde Argentina.