La Dirección Nacional de Aduanas (DNA) emitió un comunicado para expresarse en relación al caso de las mercaderías que fueron sustraídas del puerto GICAL y que fueron reclamadas por Armando Ahmad Khalil Chams, polémica que derivó a su vez del conflicto entre Julio Fernández y el senador Martín Arévalo.

Al respecto, la institución señala que en ningún momento se le negó participación en el sumario al empresario de origen libanés, quien había acusado directamente a Fernández por apropiarse del container para revender los productos a un amigo suyo.

Asimismo, afirma que su nombre “no aparece en la documentación de importación, por lo que no correspondía incluirlo en el sumario y consecuentemente tampoco correspondía notificarle de la apertura del mismo”.

Aduanas señala que se publicaron edictos para la presentación de cualquier persona que pudiera acreditar la disponibilidad jurídica sobre las mercaderías que habían sido incautadas como contrabando. En este caso, Champs no lo hizo en todo el transcurso del sumario que duró 7 meses aproximadamente.

El comunicado manifiesta que el empresario denunciante “no realiza operaciones de importación hace 10 años”, de acuerdo a los registros de la DNA, pero igualmente se acercó a reclamar la carga más de un año después de la incautación cuando ya se había procedido al cierre del sumario.

En aquella oportunidad, se calificó la situación de la mercadería como “de contrabando”, disponiendo el comiso de la misma y la denuncia y entrega de la documentación al Ministerio Público.

Con relación al robo de mercaderías en el predio de GICAL, Aduanas reitera que se llegó a efectuar la denuncia pocos días después del hecho y ya existe una causa abierta en la Fiscalía a cargo de la fiscal Noelia Naumman de Mariano Roque Alonso.